El principal malestar de los países tercermundistas goza de pequeños nichos empresariales, que se nutren del sacrificio de sus empleados.
En algunas empresas gozan de ciertos beneficios, y en otras de menos que eso.
Su filosofía es el de aminorar gastos, especialmente reduciendo personal y sobrecargando en funciones y actividades al personal con el que deciden quedarse.
El problema para el que se inicia en su camino laboral, pues obviamente es en encontrar trabajo, y luego luchar por mantenerlo.
Para crecer hay que sudarla, y para ganar pelearla. Simples conceptos fáciles de aplicar, lógicos si lo pensamos.
Pero el asunto va un poco más allá, la gente pelea porque no los boten, las personas trabajan para desprestigiar a su compañero, en el cómo culpar a los demás, han perdido el nivel de conciencia de aceptar sus errores, y siempre dejan en evidencia de que siempre puede ser culpa del otro.
Tenemos el temor de que siempre puede venir otro profesional con igual o mejor experiencia que desee trabajar por menos y devalúan puestos jerárquicos cerrándole la puerta a personas cuyo salario debe de ser superior por sus méritos laborales.
Los cargos generalmente son híbridos entre varias áreas ya que debemos de estar pendientes de la labor del resto de compañeros para saber si procesaron o no los requerimientos solicitados, finalmente, terminas realizando las cosas tu, para que todo proceso iniciado se culmine.
Es que entonces, nuestro trabajo nunca es suficiente, nuestras actividades son interminables, y cuando creemos en quedarnos hasta tarde para adelantar el trabajo de mañana, nos damos cuenta de que nos estamos poniendo al día en los trabajos del ayer.
Sacrificamos el amor de nuestros seres queridos, la educación de nuestros hijos, nuestra salud, nuestros pensamientos, nuestro tiempo, a cambio de qué, de un sueldo. Un sueldo que sólo te permite hacerte la idea de tu poder de endeudamiento para poder tener esas pequeñas cosas que consideramos indispensables.
Un latino una vez se fue a trabajar a una empresa alemana, en Alemania, y el latino se quedaba hasta tarde todos los dias "para sorprender" a su jefe alemán. Un día el alemán le dijo: "por qué siempre te quedas hasta tarde?" y el latino contestó "trabajando jefe" a lo que el alemán molestó le indicó "aquí si te quedas hasta tarde es por dos opciones o eres un incompetente que no sabes organizar tu trabajo? O yo soy un sinvergüenza que te estoy explotando con excedente de trabajo" "Te digo algo? yo no soy un sinvergüenza" y el alemán siguió su camino... Mientras que el latino empezó a irse a su casa temprano.
En Ecuador, hay pocos Jefes alemanes, por darle a esa calidad de empresario una nacionalidad.
Necesitamos mejorar nuestras estructuras, estandarizar roles, tener más especialistas por cargos, más personas operativas que ocupen su tiempo debidamente, pero aquí es difícil y todo se vuelve un círculo vicioso, el empresario recarga de trabajo, el empleado vive renegando y no haciendo sus cosas a tiempo y por ende se le sigue de recargando de trabajo para que siga renegando.
Y si mañana no nos quedamos hasta tarde?, y si mañana somos humanamente proactivos, y nos ponemos una vez al día, que lindo sería levantarse un día y saber que puedo hacer un requerimiento y no debo de perseguir a la persona para que lo realice, que le importa lo que haga, que a todos nos importa lo que hagamos porque por más mínimo e innecesario que parezca valdrá la pena para cada uno, y para el otro que lo necesita.
Y si mañana saldremos temprano y llegamos a la casa y podemos tener especio para compartir con nuestras familias, y que en lugar de que sólo arropemos a nuestros hijos podamos jugar con ellos?
La solución está en nosotros, en cada uno de nosotros, y priorizando lo que realmente importa.
No más columpios vacíos en los parques, hay que brindarle tiempo a los nuestros, a fin de cuentas para ellos y por nosotros es que realizamos todo esto, entonces, que valga la pena ganarlo, para gastarlo en vida y no en enfermedad.
Hay que se proactivo sin que se convierta en explotación, y ponernos de acuerdo todos de que las reglas son claras, el principio es básico, si uno mismo no se preocupa por cada cual nadie lo hará, y cuando mañana no te encuentres, con suerte y sólo si tienes suerte a la empresa le dolerá tu partida.
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