miércoles, 15 de agosto de 2012

Improvisando - Un día cualquiera

Hoy tuve que salir a dejar un par de papeles a una oficina y como el día estaba realmente lindo, decidí improvisar un poco, subirme a un bus X y dar una vuelta por la ciudad, que aún no termino de conocer.

"El primer bus que esté parqueado en la siguiente parada, lo tomo y me voy de tour" pensé.

Vi la 104 y me subí. Súper nerd (aplicada), abrí un nuevo archivo de notas en mi celular para ver qué cosas interesantes encontraba, para luego turistear con mi hubby o con alguna futura visita.

Pasé por un Biergarten (patio de cervezas con piqueos, para pasar el día entre amigos) que estaba frente al Teatro de la Ciudad (que no había visto antes) y luego seguí avanzando, casas, casas, casas, condominios, colegios.. mmm, nada interesante... Zeppelinplatz (una parada), "¡Wow!" exclamé "Si hay una Beethovenstr., Mozartstr., qué bacán que haya una plaza o parque en honor a Zeppelin", por su puesto mi mente musical lo había asociado al grupo Británico  LED ZEPPELIN y no a la aeronave (globo dirigible) que lleva el nombre de su creador Count Ferdinand von ZEPPELIN.  (información que investigué al llegar para hacer este escrito).

Entonces en qué estaba... Zeppelinplatz... mi mente voló a un mini concierto de rock en ese parque en honor al grupo que llevaba su nombre y exclamaba mentalmente mientras sonreía "¡Qué increíble!".

Me perdí un par de paradas mientras divagaba entre mis pensamientos, así que no recuerdo mucho lo que vi, pero cuando me di cuenta me encontraba en una parte de la ciudad muy bonita, las casas, aparentemente se veían más nuevas y mejor mantenidas que las casas de otras zonas y pude anotar la parada de ese lugar (Donnersbergstr.), como para darle una vueltita en algún momento.

Descubrí donde estaba una piscina famosa que la gente la visita principalmente en verano Monte Mare, linda por lo que he visto en la web, aún no he tenido el gusto de visitarla, pero está en la lista de "Cosas por hacer en Kl".

Sin darme cuenta cuándo, era la única dentro del bus, a parte del chofer y sin haber indicado que me iba a bajar (se oprime un botón que indica "me bajo en la siguiente parada"), el bus se detiene en la siguiente parada y nadie se subía ni bajaba, presumí que hacía tiempo hasta que cumpla con su horario (suelen hacerlo) y en eso "¡tun-tun!" (el micrófono) "¡Última parada!". Y mis reflejos de defensa verbal en otro idioma no están muy adiestrados aún, así que sólo pude decir "¿La última?", "Sí" respondió.

Un tanto desconcertada me bajé del bus, en otra ocasión había tomado la 102 e hice todo el recorrido, dejándome en la misma parada que había tomado cuando tomé el bus, por ende asumí que sucedería lo mismo con la 104, pero no, me había bajado, en el medio de algún lugar de esta ciudad, que como ya había indicado, sigo sin terminar de conocer.

Busqué en la parada algún cartelito que diga a qué hora pasa el siguiente bus y no había tal cartel (que hay en todas las paradas) así que utilicé mi mente de persona que creció en una ciudad donde se camina con la mano sosteniendo la cartera para que no se la roben, en lugar de que la cartera cuelgue libremente y concluí "Se lo han robado".  Revisé la parada en Internet, pero tampoco indicaba que ahí recogerían a nadie más adelante "Extraño".

Friedhoy Eingang West (el nombre de la parada Entrada Oeste del Friedhof), "Friedhof, qué será esto y si tiene varias entradas, debe ser algo grande, otro parque tal vez, algo lindo para ver, pasear y tomar fotitos" pensé. Me puse a buscar la palabra en Internet (Dios bendiga los Smartphones) para poder ver si valía o no la pena de entrar y mientras se cargaba la página, avancé por la calle que me habían dejado y noto una exhibición de lápidas y florerías, antes de que se cargue la historia del Friedhof, concluí, acertadamente que estaba en una calle que no conocía, en una zona que no había visitado, al pie del CEMENTERIO, hubiese parecido película de terror, si el día no hubiese estado tan brillante, hice a un lado el típico pensamiento de "así es como mueren los buenos en las películas" y proseguí al siguiente pensamiento (de mi creación por cierto) que me ha ayudado en varios aprietos similares "Cuando no se sabe dónde estás ni cómo salir de ahí, sigue recto, que a algún lugar seguro llegas y podrás ubicarte".

La avenida en mención

Y eso hice, llegué a una calle ancha, sinónimo mental de una avenida principal y con la orientación del estadio Fritz-Walter-Stadion (que se ve en toda la ciudad), llegué a la siguiente parada (tenía cartelito con el horario del bus) que me regresaría a la parada que necesitaba llegar para ir a casa.







dejó de ser sólo una avenida





Nota para mí misma: Sí un día deseas ir a recorrer la ciudad, procura llevar zapatos cómodos, que no generen malestar al ser retirados cuando llegues a casa.







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