Lo que vemos, no siempre es lo real

Se han preguntado si todo lo que has creído con certeza, ha sido cierto?

En más de una ocasión hemos sido víctimas de trampas mentales, en donde asumimos una situación en base a la información que nuestra mente posee en ese momento.

Situaciones que han sido mal interpretadas, por el don de la palabra, para hacer valer un punto de vista (tanto en lo positivo como en lo negativo).

Generalmente nuestra menta ociosa prefiere adquirir información que sumada a nuestros temores den una conclusión inexistente, que lo único que consigue es hacernos pasar un mal rato.

Esto se debe al viejo y conocido refrán, con la cuál concuerdo "es más fácil destruir que construir". Cambiar nuestra tendencia mental para asumir lo peor, es un trabajo de todo los días, observar más allá de lo que nuestros ojos puedan ver, es de entrenamiento, sensatez y valentía. Tener la humildad para aceptar que no somos el centro del universo, y recordar que la Tierra gira alrededor del Sol, y no al rededor nuestro, ya es un paso grande, para abrir nuestras mentes, y por ende cambiar paradigmas.

Las cosas no son lo parecen, ni nadie es dueño de la verdad absoluta, cada uno cuenta con su verdad, y nunca está de más aceptar las verdades de cada cual, esto nos ayudará a comprender más a nuestro entorno y a nosotros mismos.


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