Casi dos meses después de mi última publicación reaparezco entre las cenizas, no por compararme al Ave Fénix esta vez, sino por invocar la llegada del año nuevo después de la mundialmente conocida tradición de la quema de monigotes de mi país.
Pero el año 2012 terminó hace rato, es más ya sólo nos quedan 11 meses en el 2013 y hay que regresar a los lindos hábitos de expresar ideas sueltas, reflexiones, anécdotas, etc.
Empiezo el 2013 súper motivada, mirando de frente, aclarando un poco más mi mente y con ella mis sueños, descubrí que el 2012 fue para mí un año al estilo de película de acción norteamericana, mucha bala y pocos aciertos, me encontraba en la faceta de "a lo que venga" y en esos días de reflexión en dónde el clima no ayuda para pasear por las calles, sino que te conformas con ver por la ventana y mover tus cabeza al ritmo de las despeinadas hojas concluí, que me va mejor cuando me enfoco, así que en esas ando, depurando ideas, anhelos, necesidades, para enfocarme en Plan A o B o C, etc., y no ir por todos a las vez, priorizar los sueños para cumplirlos de a poco, ese creo que es mi principal objetivo de este año.
Empecemos hoy mientras despedimos Enero.